PROZAC


La luna es un hielo en el vaso de sombra
que me ofrece la vida. ¿Existe alguna historia
que no intente negar su tenebroso epílogo?
Pero el monstruo soy yo. No ningún otro
a quien pueda matar para salvarme.
La vida es, justamente, este desastre.
¿Cómo estirpar la culpa de las piedras
y parar el dolor dentro de un tunel?
¿Cómo sentir si, lejos en la noche,
está llorando nuestra hija muerta?
Los antidepresivos son como pesticidas.
Y el final de los cuentos siempre es falso,
para que ningún niño se suicide.

JOAN MARGARIT
"Casa de misericordia", Visor, Madrid, 2007

4 comentarios:

Cucaracha homicida dijo...

Increible, tio. Una vez más, gracias por compartir.

Abrazo, gari.

Anónimo dijo...

Cucarachagari, cuando te venga bien, revoléame (al email) algo pa la revista, un poema, una piedra, lo que te coja mejor.

Anónimo dijo...

Margarit es el mejor poeta vivo de este pais, ojalá nos deleite aún con muchos más libros como este!

Cucaracha homicida dijo...

Quieres recomendaciones de un servidor, ¿O me pides secreciones?

Creo que no tendría ningún problema en enviarte cualquier cosa que quisieras, pero, ¿Para una revista?